Navegante
Pablo alboránque el mundo se le pone del revés,
cuando podría estar hoy a sus pies.
No quiere ver,
no quiere ni siquiera conocer
lo que le ocurre en realidad.
Viene y se va,
jugando con su vida hasta el final,
hasta que el cuerpo ya no aguante más.
Viene y se va,
viviendo una mentira que le da
sólo problemas y le quita su libertad.
Navegante,
que oye los rugidos del perdido andante,
vigilante,
en la noche oscura hasta que el sol se levante,
miedo interno,
que le recorre el cuerpo y grita en silencio.
Lo sabe bien,
que aquí o sangra o nada le darán,
porque ni el cielo le protegerá.
Lo sabe bien,
que ahora lo único que hay que tener
es mucha fuerza para saber lo que hay que hacer.
Navegante,
que oye los rugidos del perdido andante,
vigilante,
en la noche oscura hasta que el sol se levante,
miedo interno,
que le recorre el cuerpo y grita en silencio.
Se le ha cortado su vida,
se le cae el mundo encima,
no tiene fuerzas ni pa' respirar.
Se le agota su tiempo,
se consume hasta morir,
tan pendiente de su vida ya la ve.
No supo vivir,
no supo vivir,
no supo vivir,
no supo vivir.