El compositor
AmanteaDe humilde situación
Donde no sobrevive
Ninguna ambición
De poca elegancia
Su roto pantalón
De chico él quería
Escribir una canción
Y entonces reaccionó
Ya no lo aguantó más
Quería algo mejor
Su sueño conquistar
Conoció gente
Que le transformó la vida
Su viejo anhelo
Finalmente cumpliría
Pero el tema
Que quería escribir
Poco a poco
Lo empezó a destruir
Tomó papel y lápiz
Unos versos pensó
No estaban a la altura
Luego los descartó
Se fue en busca de ayuda
Rincones exploró
A manos extranjeras
Les compró inspiración
Y su nariz manchó
Y comenzó a volar
El polvo blanco usó
Necesitaba más
Y hoy él vaga
En los rincones más oscuros
Refugiado en la noche
Estará seguro
Depende siempre
De tener su dosis diaria
Según el dicho
Nunca muere yerba mala
De vuelta a lo suyo
El sueño recordó
Su placer no llenaba
El hueco en su corazón
Así probó de nuevo
Componer su canción
Después de unos intentos
Cayó en la frustración
Empezó a enloquecer
Y ya no intentó más
Su cabeza explotó
Cambió su realidad
Siguió mojando
Su nariz en polvo blanco
Y su locura comenzó a traicionarlo
Y así fue como
El viejo dicho no acertó
Su simple sueño
Al final lo asesinó