Aquí se paró el reloj
A las nueve menos veinte
De repente me encuentro solo
A las nueve menos veinte
De repente me encuentro solo
Solo queda por vender
Treinta metros cuadrados
Espacio reservado a quien
Probablemente fue lo más sagrado
Hoy se ha alejado para nunca mas volver
Un portazo y la pared
El sueño interrumpido en un suspiro
Los ojos rojos
Desde lejos no me ves
Y la pena dura tanto
Como el camino que nos quiera proteger
Desde este lado no hay un motivo
Quien sabe porque
Del otro lado será lo mismo
¿Qué le vamos a hacer?
Probablemente no habré cambiado
Es posible que después
Después de algunos años
Seamos dos extraños
Que se vuelvan a entender
Es posible que también
Todo se haya perdido
Perdido en el olvido
Si me dejas de querer
Desde este lado no hay un motivo
Quien sabe porque
Del otro lado será lo mismo
¿Qué le vamos a hacer?
Probablemente no habré cambiado
Probablemente no habré cambiado
Aquí se paró el reloj
A las nueve menos veinte
De repente me encuentro solo
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