Mis horas me destrozan

El mundo no me entiende ni yo a el,
Tus costumbres me encarcelaron,
hora solo quiero seguir preso de ti,

Tú armas, encadenas, sueltas y te largas de las vidas.
De tus filosofías embriagas,
No te importa nada de los otros,
Solo gobiernas con raíces de tu piel.

Ahora deseo ser preso de ti,
Que locura la mía no quiero vivir así,
Regresa y átame los brazos en cadenas de ti,
No quiero esta libertad, por que no soy feliz.

Me ahogan tus manos que no tengo,
Me atan las sombras de tus brazos en mí,
Vuelve tus pies, entra en la puerta de nuestra magia,
Se muy bien que eras feliz.

Quiero el mismo veneno que no tengo
así muero aquí, muéstrame la misma mascara
Ven hazme dichoso, golpea la puerta de tu sarcasmo
No me entiendas, no quiero entenderte solo no quiero un fín.